martes, 17 de junio de 2008

vomito y estoy loco de sueño

Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas.

Todo es veloz e higiénico, transcurre en un brevísimo instante.

Saco los dedos de la boca, y en ellos traigo sujeto por las orejas a un conejito blanco.
El conejito parece contento, es un conejito normal y perfecto, sólo que muy pequeño, pequeño como un conejilo de chocolate pero blanco y enteramente un conejito.


"Carta a una señorita en París" - Bestiario. Julio Cortázar

2 comentarios:

Cintia Catán dijo...

Qué hermoso texto de Cortázar, Caro! Ahhh, si uno pudiera escribir así, aunque sea un cuento que tenga las hermosas imágenes del gran Julio. Ya está, no habría nada más que pedir (al menos, artísticamente hablando). Perdón por la mala prosa; la agoté haciendo un trabajo práctico :) Te mando un abrazo grande! Ahora, paso a comentar el post anterior, que es muy lindo también.

Anónimo dijo...

no me alcanzan los dedos de la mano para contar la cantidad de veces que leí ese pequeño poderoso librito de sentimientos.

y no me canso de volver a leerlooo.

-QUIEEEERO MÁSSS!
-no se lo merece
- =(